En la empresa de hoy, las acciones que realiza el Director Financiero (CFO) de una organización son  imprescindibles y abarcan más allá del campo meramente contable y financiero. Veamos algunas de ellas…

Lo que bien comienza, bien acaba…

Lo que bien comienza, bien acaba, por lo menos eso es lo que dice el refranero popular y, en el caso del tema que nos ocupa no iba a ser la excepción. Es fundamental que el Director General (CEO) junto con su Director Financiero (CFO) establezcan de manera clara y ordenada cuales son las tareas que éste último debe cumplir. En otras palabras: que se espera de ese cargo. No es raro observar empresas donde perfiles poco transparentes terminan derivando en tareas que nada tienen que ver con el nombre del puesto y candidatos excelentes acaban realizando tareas que no guardan relación con el puesto que tienen sobre el papel. Esta tarea comienza en el momento de diseñar el perfil del cargo, lo cual debe realizarse de manera realista y ajustada a cada empresa, contando con la asesoría del área de Capital Humano.

Optimizar los recursos de la organización

La tarea global de todo CFO es optimizar los recursos de su organización. Para ello, debemos entender como recursos no solo los materiales, sino también los humanos. De hecho el atender las necesidades de cada departamento en particular es crucial para llevar a cabo esta labor: que perfiles necesita, que programas le funcionan, que equipos tiene, como se pueden mejorar los procesos, son solo algunas de las preguntas a formularse.

Funciones del CFO

El CFO de hoy tiene funciones más amplias y determinantes que el de hace unos años. Así pues:

• Debe implementar los procedimientos necesarios para recabar toda la información que necesita
• Solucionar los problemas diarios de liquidez
• Asesorar en las decisiones de crecimiento y diversificación
• Mantener la contabilidad actualizada y ajustada a la normativa vigente
• Conocer y cancelar los diferentes tipos de impuestos de manera puntual optimizando los recursos de la organización
• Convertirse en un “activador” del personal a su cargo para lograr su motivación y un desempeño destacable. 

Plazos y procedimientos

A fin de dar cumplimiento a los puntos enumerados en la lista anterior, el CFO deberá establecer plazos y procedimientos de entrega de datos para cada departamento de la empresa, involucrándose en áreas que, en principio, no están bajo su responsabilidad, como es el departamento comercial. Todos los que hemos trabajado en empresas de una cierta envergadura, con metas de cumplimiento establecidas desde una casa matriz sabemos a qué me estoy refiriendo: la venta de último minuto que no se ha concretado durante todo el mes pero que se espera lo haga el último día y con la cual se alcanza la cuota asignada. La transferencia que “seguro” el cliente realiza hoy pero que no se hace efectiva hasta mañana. El envío de los estados financieros a la casa matriz el X día de cada mes…De todo esto se debe ocupar el CFO quien, junto con sus homólogos y equipo, deberá construir un calendario de tareas y plazos de entrega que toda la organización debe conocer y cumplir. 

Negociación y consenso

Como se puede deducir del punto 4, el CFO debe tener “mano izquierda” para negociar y obtener el consenso de todas las partes involucradas. Y es aquí donde entran las tan mencionadas “habilidades blandas” del ejecutivo, sin las cuales no logrará la anuencia del equipo y las fechas y metas establecidas verán muy lejos su cumplimiento.

Necesidades de la organización

La obtención de una información oportuna, consistente y adecuada no se logrará a no ser que exista una plataforma tecnológica que facilite el trabajo y esté acorde con las necesidades de la organización. Y vamos a detenernos en este último punto, haciendo un símil automovilístico: Usted no usaría un formula 1 para correr el rally de Dakar, como tampoco manejaría un todo terreno para competir en el circuito de Monza, creo que es bastante gráfico…

Una persona distinta cada día…

Hace muchos años, cuando trabajaba en una multinacional nos encontramos con el siguiente problema: todos los días nos llamaba una persona diferente, de un departamento distinto, pidiendo informes de acuerdo a sus necesidades. No terminábamos de elaborar uno cuando ya teníamos en la mesa tres solicitudes mas. Cabe mencionar que en ese momento las herramientas informáticas eran mucho más rígidas que hoy y muchas de ellas ni siquiera existían. Este problema, que obviamente era de la casa matriz, se acabó cuando se establecieron tres reglas básicas:

• Solo una persona, de un departamento específico, podía solicitar la información
• De manera conjunta, matriz y filial, diseñamos los formatos para el envío de los datos. Estas plantillas no podían ser variadas de manera unilateral.
• La información era enviada una vez al mes al departamento asignado y éste lo distribuía a las demás áreas en la empresa matriz.

Director multifuncional

Contabilidad, cobranzas, auditoria, presupuesto, impuestos, tecnología, estrategia, análisis DOFA y de la competencia, manejo de las instituciones financieras y gubernamentales, liderazgo, asertividad… la lista resulta abrumadora, por lo que un buen CFO debe rodearse de personal especializado con un alto nivel de compromiso que le ayude a lograr sus metas y por ende las de la organización.

Habilidades duras aunadas a las blandas son la garantía de un buen desempeño. Un desequilibrio muy profundo en las mismas conlleva, por lo general, a unos resultados deficientes y hasta desastrosos.

Estoy convencida, amigo lect@r, que se sintió identificad@ con uno o varios puntos del articulo. Si es así, espero que las recomendaciones que menciono le sean de utilidad.

¡Nos hablamos en el próximo post!

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